Caracterización físico-química del suelo en áreas de producción de cereales, bajo la influencia de diferentes coberturas vegetales, en Santa Fe.

Abstract

La agricultura constituye la principal actividad económica de la provincia de Bolívar, destacándose la parroquia Santa Fe por contar con la mayor superficie destinada a la producción de cereales, particularmente trigo y maíz. A pesar de las condiciones agroecológicas favorables, en los últimos años se ha observado una disminución en la productividad del trigo. Esta situación se ha atribuido al deterioro físico y químico del suelo, derivado de la actividad antrópica, la reducción de la cobertura vegetal y la implementación de prácticas agrícolas inadecuadas. Ante este contexto, los objetivos de la presente investigación fueron: (i) evaluar el estado actual de las propiedades físico-químicas del suelo, (ii) comparar dichas propiedades según el tipo de cobertura vegetal dominante, y (iii) proponer un plan de fertilización sostenible. Para ello, se aplicó un muestreo estratificado en zonas con historial de siembra continua de trigo en rotación con maíz. En cada sitio se recolectaron 10 submuestras compuestas a una profundidad de 0 a 20 cm. Las variables analizadas incluyeron: pH (método electrométrico), materia orgánica (volumétrico), textura (método de Bouyoucos), contenido de nitrógeno y fósforo (colorimetría), y concentración de potasio, calcio, magnesio, hierro, manganeso, cobre y zinc (espectrofotometría de absorción atómica). El análisis estadístico se realizó mediante modelos lineales generalizados y mixtos, con separación de medias mediante la prueba LSD de Fisher (p < 0,05). Los resultados evidenciaron una interacción compleja entre las propiedades edáficas, el tipo de cobertura vegetal y las prácticas de manejo agrícola. Se observó que niveles elevados de nitrógeno se relacionaron con una mayor acumulación de materia orgánica, mientras que en áreas de producción cerealera con alta intervención antrópica y laboreo intensivo, los niveles fueron de medios a bajos. El fósforo presentó una acumulación significativa en el 71 % de la superficie muestreada, atribuida al uso excesivo de fertilizantes fosfatados. Aunque los suelos son de origen volcánico, el potasio se encuentra desbalanceado, probablemente como consecuencia de prácticas de manejo inadecuadas. El calcio y el magnesio mostraron concentraciones de medias a altas, aunque su disponibilidad está influenciada por su forma química y la competencia iónica. Respecto a los micronutrientes, se detectaron concentraciones elevadas de zinc, hierro y manganeso en áreas con alto contenido de materia orgánica. La materia orgánica fue mayor en zonas con vegetación natural primaria, y significativamente menor en áreas degradadas por el monocultivo, la quema de residuos y la remoción del rastrojo. El pH fue predominantemente neutro en zonas de cultivo intensivo y ácido en áreas con cobertura vegetal densa. Además, se identificaron condiciones de alta compactación del suelo, baja infiltración y elevada temperatura superficial en suelos intervenidos, lo cual afecta negativamente el desarrollo de los cultivos.